miércoles, 24 de junio de 2015

Importancia de la salud oral previa al embarazo y durante el mismo.

Los cuidados orales  prenatales son de vital importancia tanto para la futura madre como para el bebé que se está formando. La visita al odontólogo es parte del cuidado integral durante la gestación. Es aconsejable que toda mujer se haga un examen bucal al comienzo del embarazo, aunque lo ideal es que las mujeres que planean tener hijo acudan a una revisión odontológica antes de quedar embarazadas e inicien un tratamiento preventivo lo antes posible.

Durante el primer trimestre del embarazo, entre el 75 y el 80% de las mujeres presenta náuseas y vómitos, Los ácidos estomacales pueden causar una pérdida de minerales y desgastar el esmalte dental, es decir, la capa que recubre los dientes; y también pueden irritar la mucosa que cubre el interior de la boca. Para prevenir esto, después de vomitar se recomienda enjuagarse la boca con agua o con una cucharada de bicarbonato de sodio disuelta en una taza de agua.

Los cambios hormonales del embarazo aumentan el riesgo de desarrollar caries, especialmente en las mujeres fumadoras con deficiecias nutricionales y vitamínicas; y también pueden afectar las encías y provocar la gingivitis del embarazo. Dichos cambios y el uso de algunos medicamentos pueden producir sequedad en la boca. Por otra parte, la composición de la saliva cambia al final del embarazo y durante la lactancia, lo cual predispone también a una erosión del esmalte.

Es necesario adoptar medidas para controlar las caries y evitar la transmisión de bacterias al recién nácido. Para ello es fundamental una buena higiene oral. Se recomienda el cepillado dental después de cada comida utilizando un cepillo suave para evitar las náuseas, un dentífrico que contenga flúor, y el uso de la seda dental. Se aconseja seguir una dieta balanceada, evitando el consumo de alimentos con azúcares y almidones y de bebidas gaseosas. Para prevenir las náuseas es conveniente ingeriri frutas frescas, vegetales y yogurt.

Cuando una mujer esta embarazada o tiene sospecha de estarlo, es importante que se lo haga saber a su odontólogo. Los tratamientos odontológicos no deben posponerse en caso de dolor, infección, caries o alguna otra urgencia. En la medida de lo posible se recomienda evitar radiografías, especialmente durante el primer  trimestre, pero cuando éstas son urgentes se pueden tomar adoptando las medidas de protección pertinentes.  Se debe consultar al médico o al odontólogo antes de tomar cualquier medicamento. La tetraciclina, por ejemplo, produce alteraciones en la coloración de los dientes del feto. Los blanqueamientos dentales están contraindicados con el embarazo, ya que los agentes blanqueadores liberan mercurio de las amalamas y se puede producir malformaciones fetales.

martes, 23 de junio de 2015

Periodontitis y Embarazo.

La gingivitis del embarazo es una inflamación de las encías con enrojecimiento, dolor y sangrado fácil, que se presenta entre el 60 y el 75% de las mujeres en el periodo comprendido entre el tercer y el octavo mes de gestación y por lo general desaparece después del parto. Si la gingivitis no es controlada, puede conducir a una enfermedad mas grave llamada periodontitis, en la cual se inflaman los tejidos que rodean los dientes, puede haber supuración y en los casos más severos se destruye el hueso y se aflojan los dientes. 

Otra afección que puede aparecer durante la gestación es el épulis del embarazo, una pequeña tumoración benigna de color rojizo que crece sobre la encía en el sitio de unión de dos piezas dentarias y aunque es muy incomoda para la paciente no implica ningún riesgo para el bebé. El épulis suele desaparecer una vez finalizado el embarazo, pero en algunos casos requiere de cirugía. 

Loa cambios hormonales que se producen durante el embarazo, tales como el aumento de los niveles de estrógenos y progesterona, promueven la dilatación de los vasos sanguíneos, aumenta el flujo de sangre en las encías y reducen la respuesta inmune, permitiendo la acumulación de placa bacteriana en los dientes aumentando la vulnerabilidad en las encías. 

Por otra parte, la infección periodontal induce un aumento en la concentración de la prostaglandinas y otras sustancias en el líquido amniótico, las cuales pueden desencadenar el trabajo de parto y constituyen un factor de riesgo de parto prematuro, bajo peso al nacer y preeclampsia. 

Un estudio realizado por la Dra. Kjersti Asgaard, profesora Asociada del Departamento de Obstetricia y Ginecología de Baylor College of Medicine, que fue publicada en la revista Science Translational Medicine, reveló que la placenta no está libre de bacterias como se creía anteriormente. Por el contrario, el saco en el cual crece el bebé alberga microorganismos que son beneficiosos para el recién nacido. Sin embargo, cuando hay una infección periodontal, las bacterias provenientes de las encías pueden llegar a la placenta a adelantar el parto. 

La mejor manera de prevenir y tratar la gingivitis es manteniendo una buena higiene bucal que elimine la placa bacteriana. Esto se logra mediante el cepillado correcto de los dientes y el uso de la seda dental. También son recomendables los enjuagues de agua tibia con sal. La vitamina C fortalece la encías y reduce el riesgo del sangrado y el calcio ayuda a mantener los dientes sanos y fuertes. Se deben evitar los alimentos y las bebidas azucaradas, al igual que el cogarrillo. Por último, es muy importante visitar al odontólogo para que realice una limpieza dental profesional si es necesario, una limpieza profunda de las encías. 

miércoles, 17 de junio de 2015

Lactancia materna y salud oral en los primeros meses de vida.

La lactancia materna ofrece beneficios importantes tanto para la madre como para el recien nacido. El amamantamiento favorece el crecimiento y el desarrollo del bebé desde el punto de vista nutricional, inmunológico y afectivo: y en lo que se refiere a la salud oral, promueve un desarrollo correcto de la respiración nasal la mordida y la deglución, ayuda a prepara al niño ara el desarrollo del lenguaje, facilita la salida de los dientes y mejora la alineación de los mismos. 

En los reciém nacidos, la mandibula es mucho mas pequeña que el maxilar superior y está situada hacia atrás. La lactancia materna genera estimulos que promueven el crecimiento de la mandíbula y ayudan a prevenir el desarrollo de anomalías en los dientes y la cara. Cuando el bebé toma el pecho, el borde anterior del maxilar superior esta apoyado contra la superficie del pezón para estimular la salida de la leche. La succión requiere un esfuerzo muscular, con movimientos cordinados de los músculos de la boca, la garganta y el paladar. Al ejercitar los músculos de la boca, la garganta y el paladar. Al ejercitar los musculos encargados de la masticación, la posición de la mandíbula avanza hacia delante. Por otra parte, durante la lactancia el bebé se ve obligado a respirar por la nariz, porque de lo contrario soltaria el pezón. 
A diferencia de lo que sucede con el uso del biberón, que exige movimientos de la lengua para controlar la cantidad de la leche, la lactancia materna favorece la colocación correcta y natural de la lengua. 
Según la organización mundial de la salu, la frecuencia de casos de maloclusión (problemas de la morida) es del 70 al 80% y se ha demostrado que la lactancia materna reduce considerablemente dichos problemas. 

La lactancia materna disminuye el riesgo de contaminación con microorganismos que favorecen la formación de caries; y gracias al aumento de la producción de saliva, permite mantener un ambiente adecuado en la boca que ayuda a disminuir la incidencia de caries. 
Asimismo, al no usar el biberón se evitan las caries propiciadas por la ingestión de leche azucarada y otros alimentos dulces. Al aumentar las defensas del organismo, la lactancia evita las alergias e infecciones de las vias respiratorias, las cuales pueden inducir a la respiración bucal. La composición de las grasas de la leche materna y la mayor absorción de calcio y flúor aumenta la resistencia del esmalte dental, es decir, la capa que recubre los dientes, y los demás tejidos duros de los dientes. 

La madre deber ser muy cuidadosa con la higiene oral del bebé; después de alimentarlo, es aconsejable limpiarle las encías con una gasa húmeda. La higiene adecuada del pezón tambien es importante. 
Despues de la salida del primer diente se recomienda suprimir en forma gradual la lactancia materna, especialmente durante la noche, ya que debido a que hay una menor cantidad de saliva en la boca, la suceptibilidad a las bacterias que causan las caríes es mayor.

Niño sano, adulto sano.

El cuidado de la salud oral debe comenzar a una edad temprana para evitar que se produzcan afecciones tales como caries y enfermedades de las encías, que pueden dejar secuelas de por vida. Los niños con infecciones o caries pueden presentar dolor, problemas nutricionales y de lenguaje y una baja autoestima. 

Es muy importante que la madre revise constantemente la boca del bebe para verificar que este libre de irritaciones, inflamaciones, abultamientos en las encias, o sangrado. La saliva debe ser transparente y la mucosa oral debe ser humeda, suave y de color rosado. 

Los habitos de higiene oral que de aprenden en la infancia perduran toda la vida. Desde que el niño nace hay que limpiarle las encías con una gasa eséril o con paño humedo despues de cada comida, retirando los residuos alimenticios acumulados. Cuando aparecen los primeros dientes es aconsejable limpiarlos con un cepillo de cerdas muy suaves y a los doce meses se puede comenzar a usar una pasta de dientes sin flúor. Se recomienda empezar a usar hilo dental cunando se cierran los espacios entre los dientes. El momento del cepillado debe ser relajante y divertido para el niño. Los padres deben supervisar el cepillado de su hijo y darle ejemplo cepillándose ellos mismos los dientes delante del niño. 

Los padres muchas veces subestiman la importancia de los dientes temporales, tambien llamados "dientes de leche". Es necesario cuidarlos y conservarlos en bues estado, con el fin de mantener el espacio requerido para lograr una buena alineación de los dientes definitivos. Ademas una infección en los dientes temporales puede generar dientes permanentes débiles, manchados y con caries. 

Se recomienda que el niño asista a su primera cita odontlogica tan pronto como sea posible para que se acostumbre al ambiente del consultorio. Nunca se debe amenazar a un niño con llevarlo al odontólogo como castigo si se porta mal, sino por el contrario, hay que motivarlo y darle confianza para que vaya con agrado. Idealmente se deben hacer los controles odontologicos y limpiezas profesionales cada seis meses. 

Cuando los problemas de alineación de los dientes son detectados y corregidos oportunamente, se obtienen resultados mas rápidos y efectivos. Loa tratamientos de ortodoncia funcionan mas en los niños y en los adolescentes, debido a que el hueso es todavia blando y los dientes se pueden desplazar con mas facilidad. 

Una dieta rica en calcio y fósforo en la infancia es indispensable para la salud de los dientes. Desde el embarazo hasta los doce años de edad se debe evitar el uso de ciertos medicamentos, especialmente de la tetraciclina, la cual puede producir alteraciones del color, tanto en los dientes temporales como en los permanentes, muy diciles de tratar con las técnicas de blanqueamiento actuales.

martes, 16 de junio de 2015

Una buena salud empieza por la boca.


Según la definición de la Organización Mundial de la Salud, " La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no simplemente la ausencia de afecciones o enfermedades".
La salud oral y la salud general no deben entenderse como entidades separadas, ya que la salud oral es una parte integral de la salud general. La boca refleja el estado de la salud general del individuo. Los problemas de la salud de la boca muchas veces indican que algo no funciona bien en el organismo. Una persona que no goza de una buena salud oral, definitivamente no puede estar saludable.
Muchas personas solo tienen en cuenta la parte estética y creen que una buena salud oral consiste únicamente en tener los dientes blancos y bien alineados; consideran que los signos y síntomas orales no son importantes y postergan su diagnostico y tratamiento, sin estar conscientes de que los controles ontológicos periódicos no solo son fundamentales para el tratamiento local de esas afecciones, sino que también permiten detectar problemas de otra índole.
Además de los dientes, las encías y los tejidos del sostén, la boca incluye el paladar duro y blando, la mucosa oral, la lengua los labios, la garganta, las glándulas salivales, el maxilar superior e inferior y los músculos de la masticación, así como vasos sanguíneos y nervios.
A pesar de que las enfermedades orales representan una alteración de tipo localizado, existe una estrecha relación entre las enfermedades bucales y otras de tipo general, tales como la diabetes, las enfermedades digestivas, cardíacas y pulmonares, los accidentes cerebro-vasculares (derrames cerebrales y trombosis) y los partos prematuros. La salud bucal también esta relacionada con el bienestar y la calidad de vida, debido al papel que genera en la respiración, la masticación, la nutrición y algunos procesos inmunologicos. Ademas la salud oral juega un importante papel cultural en el desarrollo de habla y de los procesos comunicativos y de socialización en todas las etapas del crecimiento humano. Las enfermedades de la boca limitan las actividades escolares, laborales y sociales.
Por otra parte, las personas que tienen problemas de la salud general o discapacidades presentan un mayor riesgo de sufrir enfermedades de la boca y deben acudir a los controles odontologicos con mayor frecuencia.  

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lunes, 15 de junio de 2015

Salud oral y rendimiento deportivo

Para alcanzar un alto nivel de rendimiento físico es fundamental tener una buena 
salud oral, ya que los problemas bucodentales afectan en forma directa o indirecta 
a los deportistas, especialmente a aquellos que entrenan todos los días. El 
aspecto estético también es importante para mejorar la autoestima, sobre todo en 
las personas que practican gimnasia olímpica. Las afecciones bucales que más 
frecuentemente interfieren en el rendimiento deportivo son las infecciones y la 
maloclusión. 


En el primer caso, una higiene oral deficiente hace que las bacterias de la cavidad 
oral se acumulen y produzcan caries o enfermedad periodontal, es decir, una 
inflamación de las encías y los tejidos que rodean los dientes. Las bacterias 
pueden pasar al torrente sanguíneo y diseminarse a otros órganos distantes, 
incluyendo el corazón, el estómago, el hígado y el sistema musculoesquelético. 
Los microorganismos presentes en los focos infecciosos producen sustancias 
químicas tales como prostaglandinas y prostaciclinas, que al acumularse pueden 
lesionar los músculos, tendones, huesos y articulaciones, y producir dolor articular, 
pérdida del tono muscular, fatiga, cansancio, y un bajo nivel de respuesta. 
Por otra parte, la maloclusión debida a la ausencia, mala alineación, o mal estado 
de algunas piezas dentarias, puede ocasionar problemas de equilibrio por 
sobrecarga en la articulación temporomaxilar (ATM), que une el cráneo con la 
mandíbula. El bruxismo, que consiste en apretar los dientes o hacerlos rechinar de 
manera inconsciente, es responsable de muchos casos de dolor en los músculos 
del cuello y la espalda. La falta de piezas también puede generar problemas 
digestivos, ya que cuando los alimentos no son triturados en forma adecuada hay 
un mayor consumo de energía, la digestión es más lenta y se producen 
deficiencias nutricionales. 


La odontología deportiva estudia la influencia de la salud oral en el deporte y hace 
que su práctica sea más segura. Por lo general, la gente no piensa que los 
problemas bucales pueden ser la causa de sus molestias. Es muy importante que 
los entrenadores, los fisioterapeutas y los atletas estén conscientes de esto. 
Cuando un individuo tiene una mala postura o presenta otros síntomas, se debe 
hacer una revisión odontológica con el fin de detectar la presencia de caries, 
maloclusión u otras afecciones para descartar que el problema sea de origen 
bucal y solucionarlo, ya sea mediante el tratamiento de las caries y la enfermedad 
periodontal, reposición de las piezas faltantes con prótesis o implantes, 
tratamiento de ortodoncia para la mala oclusión, o el uso de protectores o férulas 
nocturnas cuando sea necesario. 


Como medida preventiva se recomienda una higiene bucal adecuada; el consumo 
de chicles con Xytilol, y la realización de un control biomédico antes de participar 
en competencias. En los deportes en los que hay contacto físico, tales como 
boxeo, basquetbol, futbol, etc., es aconsejable el uso de protectores bucales para 
prevenir lesiones por traumas y evitar fracturas y avulsiones dentales. Las 
personas que respiran por la boca debido a una obstrucción de las vías aéreas 
requieren un entrenamiento respiratorio.